jueves, 25 de febrero de 2010

La franja bendita

Como decía hace unos meses, cuando termino de comer y decido descansar un rato delante de la tele, me entran ganas de volver a trabajar. Es que se me revuelve el estómago con determinada programación. Cuatro ha hecho una apuesta fuerte con estrenar la nueva temporada de Entre fantasmas -después del fracaso de Lo que diga la rubia- en la franja maldita. A ver si cuaja... porque ninguna novedad televisiva resiste al horario de la telenovela y la prensa del corazón más putrefacta.


Pero, después de cenar, la situación es totalmente diferente. Para los que amamos la televisión divertida, estimulante, ágil y crítica, a las 21:30 empieza lo bueno. El Intermedio sigue destripando incisivamente la realidad, riéndose de él mismo y cuestionando la política made in Spain. El Hormiguero divierte, hace sonreír y nos muestra a un presentador sincero y unos colaboradores que no van de héroes, son diferentes y sin complejos. Todos componen un equipo sano, valiente y original.


Ayer el programa de Pablo Motos cumplió 500 programas y nos hizo reír con sus trucos, inventos y canciones. Wyoming contraprogramó una entrevista a Falete por su 575 programa en la que mostraban al cantante todas las veces que le habían nombrado, y no para bien, en el mismo; un alarde de caradura y humor. Cada programa fue fiel a su estilo y es de agradecer.


Felicidades a los dos programas: y que cumplan muchos más!!. La única pega es que sean a la misma hora...

domingo, 7 de febrero de 2010

Falsas apariencias

Sobremesa de domingo, Telecinco, Ben Stiller, Matrimonio Compulsivo y, de repente, "fóllame, fóllame, pégame!!"

¿Qué le pasa a esta cadena que de 16:00 a 18:10 emite una película con pinta de comedia romántica pero con episodios de sexo y conversaciones nada aptas para menores?

No hay horario de protección infantil que valga, no hay respeto por nadie en esta cadena. Si unos padres se han sentado con sus hijos a echar un ratito en el sillón en una tarde tranquila de domingo, se habrán cargado los botones del mando para cambiar de canal cuando Stiller se acostaba con su chica en unas escenas de sexo explícito, con insultos y hasta golpes. La peli luego torna en comedieta romántica pero los capitulitos eróticos no son, desde luego, aptos para horario infantil.
Y lo mejor es que Telecinco lo llama Cine en Familia...